As you receive this edition of the Messenger on Saturday morning, I will be preparing to attend a Unity March and Rally sponsored by Christ Our Redeemer African Methodist Episcopal Church in Irvine. Orange County Sheriff Don Barnes is scheduled to participate in the march and to speak at the rally.  I will be representing the Diocese of Orange in my position as Episcopal Vicar for Ecumenical and Interreligious Affairs.  Although you probably will be reading this message too late to participate in the march, just in case you are able to attend on such short notice, click here for more information.

I would say that Christ Our Redeemer Church is the dominant force speaking for the needs and interests of black people in Orange County.  I spoke a couple of days ago to the pastor, Reverend Dr. Ralph E. Williamson, and I asked him how he and his congregation were doing in these tumultuous times following the killing of George Floyd in Minneapolis, Minnesota. Rev. Williamson spoke very positively about the conversations that he and his congregation had been having with Sheriff Barnes about our local situation in Orange County.

Rev. Williamson spoke of the systemic racism in our country that needs to be addressed but expressed optimism that now, together, we could address those issues.   Rev. Williamson kept emphasizing the importance of unity, that only together would we be able successfully to eliminate systemic racism and move forward in a positive way.  Which is why the Unity March and Rally on Saturday will be so important as a sign and symbol of our desire to love and care for one another in unity, together eliminating racism in our societal structures and, over time, hopefully in our hearts as well.  The Unity March and Rally also will serve as a countersign to the hatred and division of which we have seen too much lately.

I am excited about participating in the Unity March and Rally representing the Catholic community of Orange County, especially on this weekend when we celebrate the Feast of Corpus Christi.  The Feast of Corpus Christi is a great opportunity not only to be renewed in our belief in the real presence of Jesus Christ in the Eucharist, but also to remember that at the Last Supper in which he instituted the Eucharist, Jesus prayed fervently for unity: 

“I pray … that they may all be one, as you, Father, are in me and I in you … that they may be one, as we are one, I in them and you in me, that they may be brought to perfection as one, that the world may know that you sent me, and that you loved them even as you loved me … that the love with which you loved me may be in them and I in them.”  (John 17:20-23, 26)

In that spirit, I ask that even if you are not able to participate in the Unity March and Rally on Saturday, let us join Jesus in praying for love and unity among all peoples.

Al recibir esta edición del Mensajero el sábado por la mañana, me prepararé para asistir a una Marcha y Reunión de la Unidad patrocinada por la Iglesia Episcopal Metodista Africana Cristo Nuestro Redentor en Irvine. El Sheriff del Condado de Orange Don Barnes está programado para participar en la marcha y para hablar en el mitin. Representaré a la Diócesis de Orange en mi posición de Vicario Episcopal para Asuntos Ecuménicos e Interreligiosos. Aunque probablemente leerá este mensaje demasiado tarde para participar en la marcha, en caso de que pueda asistir con tan poca antelación, haga clic aquí para más información.

Diría que la Iglesia Cristo Nuestro Redentor es la fuerza dominante que habla por las necesidades e intereses de los negros en el Condado de Orange. Hablé hace un par de días con el pastor, el Reverendo Dr. Ralph E. Williamson, y le pregunté cómo estaban él y su congregación en estos tiempos tumultuosos después del asesinato de George Floyd en Minneapolis, Minnesota. El Reverendo Williamson habló muy positivamente sobre las conversaciones que él y su congregación habían tenido con el Sheriff Barnes sobre nuestra situación local en el Condado de Orange.

El Reverendo Williamson habló del racismo sistémico en nuestro país que debe abordarse, pero expresó optimismo de que ahora, juntos, podríamos abordar esos problemas. El Reverendo Williamson siguió enfatizando la importancia de la unidad, que solo juntos podríamos eliminar con éxito el racismo sistémico y avanzar de manera positiva. Es por eso que la Marcha y Reunión de la Unidad del sábado serán tan importantes como un signo y símbolo de nuestro deseo de amarnos y cuidarnos unos a otros en unidad, eliminando juntos el racismo en nuestras estructuras sociales y, con el tiempo, con suerte también en nuestros corazones. La Marcha y Reunión de la Unidad también servirán como una respuesta al odio y la división que hemos visto demasiado últimamente.

Estoy entusiasmado por participar en la Marcha y Reunión de la Unidad como representante de la comunidad católica del Condado de Orange, especialmente en este fin de semana cuando celebramos la Fiesta del Corpus Christi. La Fiesta del Corpus Christi es una gran oportunidad no solo para renovarnos en nuestra creencia en la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía, sino también para recordar que en la Última Cena en la que instituyó la Eucaristía, Jesús oró fervientemente por la unidad:

"Rezo ... para que todos sean uno, como tú, Padre, estás en mí y yo en ti ... para que sean uno, como somos uno, yo en ellos y tú en mí, para que sean llevados a la perfección como uno, para que el mundo sepa que me enviaste, y que los amabas así como me amabas ... que el amor con el que me amabas puede estar en ellos y yo en ellos ". (Juan 17: 20-23, 26)

En ese espíritu, le pido que incluso si no puede participar en la Marcha y Reunión de la Unidad el sábado, unámonos a Jesús en la oración por el amor y la unidad entre todos los pueblos.